La Pericia al servicio del Derecho, es una herramienta esencial para acercar la justicia a la equidad en los procesos judiciales, al aportar conocimientos especializados y técnicos, que permiten una toma de decisiones objetiva y justa por parte de los jueces y abogados. El trabajo del Perito se basa en la experiencia, la formación y la especialización en una disciplina determinada. Es importante que su labor se desarrolle con rigurosidad y objetividad, sin prejuicios ni intereses personales que puedan afectar su dictamen. La figura del Perito en el ámbito judicial consiste en analizar y dictaminar sobre aspectos especializados de un caso, proporcionando información relevante y objetiva que ayude a los jueces y abogados a tomar decisiones justas y acertadas. En el ámbito civil, el Perito puede ser requerido para dictaminar sobre temas tan diversos como la valuación de bienes, la verificación de daños y perjuicios, la revisión de contratos, entre otros. En el ámbito penal, el Perito es requerido para dictaminar sobre cuestiones técnicas, como la identificación de armas, la determinación de la causa de la muerte, o la verificación de la autenticidad de documentos.